3ra TEMPORADA: 8 ÚNICAS FUNCIONES - DESDE EL 7 DE OCTUBRE, DOMINGOS A LAS 21 HS !!!

¿QUERÉS HACER EL FAVOR DE CALLARTE, POR FAVOR?
sobre textos de Raymond Carver.




Domingos 20.30 hs.
Teatro Andamio 90, Paraná 660.
Reservas: 4373 5670 



SINOPSIS


Tres historias pequeñas de tres parejas conviven en un espacio y un tiempo que se esfuman y contaminan entre sí. Pero de pronto, el azar hace de estas situaciones pasajeras momentos trascendentales de sus vidas; aún sin advertirlo ellos mismos.


Ralph le lee a Marian una frase de un libro que a él le encanta. Iris y Jack se despiertan sobresaltados por un llamado telefónico en medio de la noche. Un hombre llega después de varios años a la casa de su ex mujer. Todos están allí, cada uno en su mundo. Mundo que al fin de cuentas es el mismo para todos: algún deseo frustrado, un anhelo viejo, un sueño proyectado hacia el pasado o hacia el futuro.

El director Lisandro Penelas expresa que “ese aire solitario y sin rumbo de personajes sencillos y extraños a la vez que inunda los relatos de Carver, y esa cuota de sorpresa en lo mínimo y en lo íntimo, esa suerte de misterio interior, es lo que despertó y motivó mi imaginario para abordar este material literario y llevarlo a escena.”



¿Querés hacer el favor de callarte, por favor? está basada en los siguientes cuentos de Raymond Carver:
INTIMACY and WHOEVER WAS USING THIS BED by Raymond Carver. Copyright ã 1986, 1987, 1988, Raymond Carver. Copyright renewed ã 1989, Tess Gallagher. All rights reserved. Y WILL YOU BE QUIET, PLEASE by Raymond Carver. Copyright ã 1976, Raymond Carver. Copyright renewed ã 1989, Tess Gallagher. All rights reserved


Este espectáculo contó con el apoyo del FONDO NACIONAL DE LAS ARTES y PROTEATRO.

Para tener más información sobre cada uno de los integrantes de la obra vaya a "archivos del blog".

TRAILER - Video presentación de la obra

NOTAS PRENSA

CLARÍN - Minirepo a Lisandro Penelas





LA NACIÓN - Crítica de la obra 




GALICIA EN EL MUNDO - Entrevista a Lisandro Penelas





REVISTA SUDESTADA  - Comentario de la obra 
Marzo 2011




REVISTA VEA MÁS- Comentario de la obra 
Marzo 2011






NIDO DE CARANCHOS - Comentario de la obra

JUEVES 17 DE FEBRERO DE 2011

Carver y una obra para no dejar de ver

¿QUERÉS HACER EL FAVOR DE CALLARTE, POR FAVOR?
Sobre textos de Raymond Carver


Adaptación, dramaturgia y dirección: Lisandro Penelas. Actores: Lucila Garay, Nicolás Ortiz de Elguea, Lorena Barutta, Manuel Vignau, Cecile Caillon y Daniel Begino. Escenografía: Cecilia Figueredo. Realización de escenografía: Néstor Martignago. Diseño de vestuario: Ana Lidejover. Diseño de iluminación y fotografías: Soledad Ianni. Asistente de producción: Julio Rosenberg. Asistente de Dirección: Belén Sosa. Prensa: Flavia Salvatierra. Teatro Andamio 90-Paraná 660-Reservas: 4373-5670. Domingos a las 21.15 hs.




Raymond Carver (EE.UU., 1938-1988) es uno de los más grandes cuentistas del siglo XX, un fiel representante del realismo sucio, movimiento derivado del minimalismo cuya propuesta consiste en reducir el material narrativo a su más escueta expresión, de manera que el texto sea conciso y parco. Entre los miembros de esa corriente se encuentran John Fante, Charles Bukowski, Richard Ford, Tobias Wolff y Chuck Palahniuk. Sus máximos referentes y maestros son O. Henry y J.D. Salinger.


La cuentística de Carver aprovecha esa precisión y sobriedad para sumergirse en los conflictos de sus personajes, desbordados por la frustración y la soledad. Resulta auspicioso que un joven director como Lisandro Penelas (además es actor y profesor de teatro) haya acometido la ardua empresa de adaptar a la escena tres cuentos del autor norteamericano (“Will You Be Quiet, Please” –que da título a la obra-, “Intimacy” y “Whoever Was Using This Bed”). Si bien ya había dado pruebas de su talento en las puestas de El otro día escuché esa canción que tanto te gustaba y En la mañana, de Daniel Veronese, en esta oportunidad ha debido enfrentar un desafío mayúsculo.


Hay un incuestionable dominio del espacio escénico al desplegar tres historias distintas a la vez, sin necesidad de recurrir a apagones parciales para aislar la acción que se está desarrollando: Penelas las expone simultáneamente, y logra así una densidad dramática más profunda. En este recurso se advierte un sesgo cinematográfico, como si expusiera una suerte de montaje alterno de un cruce de historias. Pero en ¿Querés hacer el favor de callarte, por favor?, las mismas no llegan a unirse, aunque los intérpretes, a veces, casi se rozan mientras se desplazan en medio de idéntico decorado. El efecto es de una gran riqueza expresiva y un sugestivo lirismo. Las canciones melódicas que se escuchan a través de una radio aportan a la representación un acertado clima melancólico.


Marian y Ralph forman un matrimonio que se ama, pero sin embargo están marcados por un desliz que la esposa tuvo en una fiesta. Ella se siente culpable y con torpeza saca a relucir el episodio y él demuestra con su reacción que no ha podido superar ese engaño. Es como si sus vidas se hubieran detenido en ese episodio y no pudieran avanzar aunque ambos trabajen y tengan hijos. Acertado Nicolás Ortiz de Elguea en su composición del acomplejado Ralph y convincente Lucila Garay en el papel de Marian, una mujer que no sabe cómo llevar adelante su pareja.


Iris y Jack están durmiendo y una llamada telefónica equivocada los despierta. Enseguida sale a relucir su malhumor, pero sobre todo aflora en ellos una hipocondría desmedida que los atormenta., y se sumergen en un remolino de confrontaciones y cuestionamientos, como una forma neurótica de ocultar el miedo a la muerte, la finitud del paso por este mundo. Tampoco se sabe en qué va a terminar esta conflictiva relación. Lorena Barutta y Manuel Vignau aportan agilidad, destreza corporal y segura dicción en las contundentes disputas que sostienen.


Él regresa inesperadamente a la casa de su ex mujer (Ella) -a la que ha abandonado hace cuatro años- con la excusa de hacerle una visita. Esta pareja -como las anteriores- tampoco sabe salir de sus situaciones traumáticas, porque, aunque ambos siguen amándose, son incapaces de reencontrarse. Un fuerte contrapunto sostiene sus conflictivos y filosos diálogos. Las brillantes actuaciones de Cecile Caillon y de Daniel Begino registran con convicción a dos personalidades diferentes a las que carcome tanto la tristeza como la desesperación.


El director (sólidamente asistido por Belén Sosa) contó con valiosos aportes. La fascinante iluminación de Soledad Ianni traza una atmósfera crepuscular, reflejo de vidas que, pese a su juventud, ya transitan el ocaso. Sus luces tenues componen un claroscuro sensible, como evanescente, para recrear ese ámbito de dolor que desgarra a los protagonistas. Otro hallazgo es la escenografía de Cecilia Figueredo (magistralmente realizada por Néstor Martignago), con esos vaporosos ventanales que prolongan el escenario hacia el exterior permitiendo vislumbrar a los atormentados Él y Raph, que deambulan corroídos por sus indecisiones. Y, por último, cabe mencionar el inteligente vestuario de Ana Lidejover, que tanto contribuye a diseñar el perfil psicológico de los personajes.


Una obra para no dejar de ver, pues el universo poético de Raymond Carver está presente en cuerpo y alma.


Germán Cáceres



MARÍA DE LOS ÁNGELES SANZ - Comentario de la obra


¿Quieres hacer el favor de callarte?
O De que hablamos cuando hablamos de amor de Raymond Carver1
La felicidad es un silencio ininterrumpido o cuando somos dueños de nuestro silencio y esclavos de nuestras palabras.
Adaptación de Lisandro Penelas

por María de los Ángeles Sanz

Al ingresar a la sala nos encontramos con espacio dividido en tres ambientes diferentes y parecidos en su cotidianidad; hacia el fondo, un ventanal duplica la mirada y permite ver a un sexto personaje, ya que los otros cinco están en escena, al que el espectador se ve incitado a espiar y a preguntarse cual es el motivo de su soledad. Dos parejas y una mujer sola se mueven y dialogan mientras el espectador busca el lugar de su ubicación; respetándose una rigurosa cuarta pared que le permite a los actores moverse, darle la espalda al público, ignorarlo en todo momento, mientras éste se siente un vecino inescrupuloso que espiara con total impunidad.
La disposición barroca del espacio escénico, permite triplicar los puntos de fuga y trabajar con la escena y la extraescena a través de esa ventana simulada que deja ver a los personajes fuera y dentro de la situación. Esta disposición es utilizada también, para que en un tiempo indefinido, los personajes intercambien su lugar en el espacio, dándole así no desde la palabra si no desde la imagen y la situación, una coherencia estética al todo. El espectador tiene entonces la posibilidad como en un cuadro de El Bosco de elegir que historia seguir, ya que mientras en el centro una de ellas se vuelve protagonista, las otras dos mantienen de algún modo, también la atención del público. Las tres historias se unen para contar relatos de parejas, y porque más allá de los motivos de su problemática, es la falta de prudencia en relación a lo dicho y a lo negado, lo que unifica su temática. Un suceso irrelevante, un teléfono que suena en la medianoche y desvela a la pareja, que a partir de allí, se envuelve en una sucesión de lugares comunes sobre la vida y la muerte para darse cuenta que cada uno tiene una idea muy diferente sobre el tema, y que es preferible cerrar ese episodio y dejar que los acontecimientos se sucedan sin teorizar, sin profundizar en sus sentimientos. La trivialidad de un recuerdo va desplegando una situación no narrada o narrada a medias y produce en el momento de la verdad la necesidad de haberla ignorado. El regreso del escritor al lugar de una relación clandestina vivida hace ya cuatro años, propone la inconveniencia de volver sobre nuestros pasos, sobre todo, cuando nuestra vida se convierte en material para la ficción narrativa. Este personaje, tal vez el propio Carver2, cargado de cinismo, en su deseo de producir un texto de efecto y exitoso, toma los acontecimientos vividos con su amante, y los transforma en literatura. Lo dicho una vez, debería haberse omitido, callado, mantenido en secreto; como algo íntimo, propio e inexpugnable en nuestras vidas. El autor pareciera afirmar que omitir no es engañar ni mentir, sino cuidar de otro, no dañar, no herir, o que la felicidad reside en el silencio, en la ignorancia de no saber que nos deparará el próximo día, y sin revolver en un pasado que sólo puede producirnos dolor. Los actores encuentran el tono, los gestos y las acciones que construyen esos seres de forma verosímil, bajo una dirección que logra crear el clima por momentos sórdido de la vida de los personajes. Las situaciones fluyen como en una coreografía fielmente ejecutada, y emocionan o arrancan una risa que tal vez evoca situaciones no tan lejanas ni ajenas; porque el tiempo, más allá que el vestuario y los objetos nos remitan al momento del enunciado, se convierte en un círculo mítico que propone la construcción de acciones que no tienen una temporalidad anclada; sino por el contrario, el cruce de tensiones a la manera barroca, también trabaja desde lo efímero del hecho teatral, conceptos eternos al alma humana. Por último, la adaptación de Lisandro Penelas logra abstraer del texto narrativo de Carver, las imágenes que lo acercan a una textualidad dramática de alta tensión.


1 Escritor estadounidense (1938 – 1988) de relatos y poesía. Definido como el autor del realismo sucio sus personajes pertenecen a la clase media baja u obrera en su mayoría, seres comunes envueltos en historias cotidianas que los enfrentan a sus deseos y a sus miedos.
2Ya que el propio autor afirmaba: “Cualquier gran escritor, o simplemente buen escritor, elabora un mundo en consonancia con su propia especificidad. Tal cosa es consustancial al estilo propio, aunque no se trate, únicamente, del estilo. Se trata, en suma, de la firma inimitable que pone en todas sus cosas el escritor. Este es su mundo y no otro. Esto es lo que diferencia a un escritor de otro.” Cada una de las parejas que conforman el relato de la pieza tiene que ver con algún elemento o situación de la vida del propio Carver. Sobre todo, la relación con su primera mujer quien trabajaba para mantenerlo, y que fue protagonista de sus relatos más de una vez donde aparecía como una mujer deslucida y sin valores.


DIARIO LA CIUDAD - Comentario de la obra
febrero 2011



CRÍTICA TEATRAL - Crítica de la obra
febrero 2011


¿Querés hacer el favor de callarte, por favor?
27-02-11
Esa luminosa opacidad
Obra sobre textos de Raymond Carver, con dramaturgia y dirección de Lisandro Penelas
Lisandro Penelas en su obra ¿Queres hacer el favor de callarte, por favor? atrapa esa poética opacidad con la cual Carver atraviesa a los seres que habitan sus cuentos.
La elección de una cadencia morosa posibilita que los conflictos vayan ganando espesura ante cada mirada, dialogo, gesto o silencio.
El muy buen entrecruzamiento de los tres cuentos de Carver (los personajes de las tres historias habitan un mismo espacio y utilizan los mismos elementos) posibilita atrapar la completitud del universo de esas personas sensibles, más cerca del desamparo que de la felicidad. Así cuando una verdad esta por develarse en una historia, irrumpe otra con un humor acido que coqueta con la muerte, que es, a su vez, atravesada por un relato en que los reproches ocultan un amor imposible. Este continuo de climas no solo permite un crescendo dramático sino que a su vez introduce una dosis de suspenso acerca de los desenlaces. Por supuesto que los estallidos y resoluciones de los conflictos están más cerca de la incertidumbre que de la certeza, sensación que también se instala en el espacio escénico.
La escenografía de Cecilia Figueredo junto con el diseño de iluminación de Soledad Ianni han creado, en muy buena forma, espacios de intimidad en ese compartir espacial de las tres parejas, dando la sensación de que cada relato tiene su propia luz y su propio espacio. Interesante es el trabajo de vestuario de Cecilia Figueredo, ya que con su cotidianeidad define a cada uno de los personajes.
Actores sensibles aprehendieron a sus personajes sin juzgarlos, dejándose atravesar por sus miedos, desasosiegos y, tenues y tiernas luces de esperanzas.
¿Querés hacer el favor de callarte, por favor? es una posibilidad para que el alma se entrevere con las siempre bienvenidas historias de Carver.

Gabriel Peralta



NOTAS DE TEATRO - Crítica de la obra
marzo 2011

MIÉRCOLES 30 DE MARZO DE 2011


¿Querés hacer el favor de callarte, por favor?- Dirección: Lisandro Penelas- Crítica

¿Querés hacer el favor de callarte, por favor?- Textos de Raymond Carver- Dirección: Lisandro Penelas


El enigma del amor en la pareja contemporánea
- Por Silvia Urite





“El deseo del hombre es el deseo “de el “ Otro, donde el “de” da la 
determinación llamada por los gramáticos subjetiva, a saber la de 
que es en cuanto Otro como desea (lo cual da el verdadero alcance
de la pasión humana).
Por eso la cuestión de el Otro que regresa al sujeto desde el 
lugar de donde espera un oráculo, bajo la etiqueta de un “¿Qué quieres?”
; es la que conduce mejor al camino de un propio 
deseo”.

Lacan, Escritos 2 Cit. Por Slavoj Zizek, Cómo leer a Lacan

Tres historias, tres parejas, el centro es el amor. Desde una pareja donde se pone sobre la mesa el tema de la infidelidad; a otra que la sobrevuela el fantasma del futuro lejano y la vejez, y una tercera, la más trágica donde él vuelve a un lugar que ya no le pertenece.

La escenografía muestra una cama, un living y una mesa. Los actores recorren los tres espacios a medida que pasan al frente. Raymond Carver (1938- 1988) fue un escritor estadounidense que basó su estilo en las historias cotidianas, su fuerte son las historias de amor.

En Argentina se han visto varias adaptaciones de su obra: Hablar de amor (Adrián Canale, 2006); Catedral y Quienquiera que hubiese dormido en esta cama (Flores Cárdenas, 2007 y 2008). Ahora llega esta adaptación a cargo de Lisandro Penelas, actor y director. Lo hemos visto como intérprete en En tus últimas noches (Francisco Lumerman) y Vientos que zumban entre ladrillos (Diego Faturos), ambas en su segunda temporada en Teatro Timbre 4.

Muy bien creados los climas y la intimidad de la pareja, parece que los estuviésemos mirando a través del ojo de una cerradura, la fantasía del voyeur. Sin embargo, lo que presenciamos son los momentos difíciles, los desencuentros, los abandonos, los engaños.

Todas las parejas gozan de verosimilitud, pero podemos destacar las actuaciones de Daniel Begino (Richard Black); Nicolás Ortíz de Elguea (Ralph) y Cecile Caillon (Ella) por su naturalidad. También podemos mencionar el trabajo de Escenografía, Vestuario e Iluminación que dan marco y caracterizan a cada personaje y momento de la obra.

Pese a ser una obra de hondo dramatismo, hay algunos gestos que, por inoportunos en la circunstancia amorosa, causan gracia, por lo que a la puesta no le faltan humor ni calidez.


CRITICUNDER - Crítica de la obra
marzo 2011



LA CATARSIS DE PAREJA

Por: Julia Gastón 

Las parejas crean siempre un mundo aparte donde se pelean, se ríen y se amigan de nuevo, es un círculo que constantemente se repite de distintas formas. Esto queda demostrado en la obra ¿Querès hacer el favor de callarte?, por favor” dirigida por Lisandro Penelas sobre tres textos de Raymond Carver, todos los domingos en el Teatro Andamio 90.

Tres historias se entrelazan: Ralph y Mariam después de una confesión toman distancia, Iris y Jack empiezan a pensar sobre cómo podrían dejar el mundo y cuántas enfermedades pueden contraer en menos de lo que canta un gallo, y por último Richard vuelve a enfrentar a Ella después de 4 años sin verla pero mandándole todos las notas que salen sobre su talentosa vida de escritor.

Al ingresar a la sala, uno ya se ve inmerso en plena obra. En el escenario, bien cerca del espectador, se encuentran los 6 protagonistas que nos van a introducir en varios mundos diferentes pero muy similares a la vez.

El manejo del espacio escénico es algo que impresiona, los personajes se mueven sin discontinuar esa fluidez que hace que la escena se vuelva algo cinematográfico, como un gran plano secuencia.

La música de Antohny and the Johnsons hace que este tríptico se una en un solo momento donde los protagonistas cantan. Algo poco usual y único que pasa, dándole más cuerpo y mucho más valor interpretativo, siendo algo delicado y profundo, pero sin llegar a ser un musical al estilo Chicago.

La iluminación crea nuevos espacios, hace que el ambiente cambie del día a la noche. Así mismo también cambia como los actores y sus emociones.

“Queres hacer el favor de callarte, por favor” es una obra de amor y desencuentro, llena de cinismo pero también de diálogos hilarantes, rápidos, donde se mantiene un ritmo interesante que atrapa el espectador.




SHOW ON LINE – CRÍTICA
7 de abril de 2011

¿QUERÉS HACER EL FAVOR DE CALLARTE, POR FAVOR?


Por Noelia Melián                 

Nos adentramos a una nueva sala teatral, y entre las brumas de  cigarrillos  vislumbramos  6 personajes extraídos  de la narrativa de Raymond Carver. El director  Lisandro Penelas,  da forma a esta obra teatral a partir de la adaptación de tres  cuentos del autor  norteamericano, “Will You Be Quiet, Please” –que da título a la obra-, “Intimacy” y “Whoever Was Using This Bed.

¿Querés hacer el favor de callarte, por favor?  Combina tres pequeñas historias, tres parejas  que “conviven”  sin encontrarse en una misma casa.  La confirmación de la infidelidad de Marian hacia Ralph, el regreso de un escritor a la casa de su ex mujer, y el desvelo de una pareja de miedosos hipocondríacos  son los momentos conyugales que en  su poder de síntesis sustenta todo un universo dramático.

La obra explora el territorio cotidiano de los relatos de Carver, donde se hace presente lo más trivial, un llamado telefónico  que desvela, como también la traición, o los viejos recuerdos que afligen a una esposa. Pero no solo están los  momentos dramáticos, sino que el humor también se despliega, sobre todo  en los personajes de Iris y Jack que con sus relatos sobre las formas en que quieren morir arrancan varias sonrisas.

El dominio del espacio escénico es fundamental en esta puesta,   las historias se suceden y se suspenden  por   una suerte de montaje alternado, (enfatizado por el uso de la iluminación)  dando un vuelo cinematográfico al espectáculo teatral, que aporta así una dosis de suspenso a cada pequeña tragedia vivida por los personajes.

La puesta en escena subraya el mundo norteamericano de  la literatura de Carver. Desde la escenografía, con esos grandes ventanales de  estética americana, acentuada también por la melancólica música en ingles que los mismos actores tararean en el escenario. El espacio escénico que se construye,  revela la absoluta intimidad de  las tres  parejas, resaltada en el uso escénico  de una cama matrimonial, lugar elegido para que los personajes tengan largas charlas. Pero remitiéndonos al titulo de la obra ¿Querés hacer el favor de callarte, por favor?, hay comentarios equivocados, y una vez abierta la caja de Pandora ya no hay vuelta atrás para ninguna de esas tres parejas, algo cambio…como dice el personaje de Ralph ¿no se como tengo que seguir?…





IMÁGENES DE LA OBRA








FICHA TÉCNICA

FICHA TÉCNICA

Actores
Daniel Begino
Lorena Barutta
Lucila Garay
Cecile Caillon
Manuel Vignau
Nicolás Ortiz de Elguea

Escenografía
Cecilia Figueredo

Vestuario
Ana Lidejover y Cecilia Figueredo

Iluminación
Soledad Ianni

Asistente de producción
Julio Rosenberg

Asistente de dirección
Belén Sosa

Fotografías prensa
Soledad Ianni

Dramaturgia y dirección
Lisandro Penelas

LISANDRO PENELAS - Director

Lisandro Penelas nació en Buenos Aires en 1983. Actor, director y profesor de actuación, se recibió como Profesor de Teatro y como Asistente en Artes del Teatro en el Colegio Superior de Artes del Teatro y la Comunicación, Andamio 90.

Inició su formación teatral en la escuela de Alejandra Boero, donde cursó talleres con Claudio Tolcachir, Luciano Suardi, Marta Lubos y Claudio Quinteros. Se formó en la técnica del clown con Marcelo Katz.

Cursó seminarios internacionales con Claudia Stavisky (Francia), Verónica Oddó (Chile) y Hugo Arturi (Estados Unidos); y participó del Seminario Dramaturgia de Emergencia dictado por Mauricio Kartún y del seminario para actores dictado por Javier Daulte y Alejandro Maci. Hizo cursos complementarios de educación rítmica y vocal, danza contemporánea, pantomima, malabares y acrobacia y cursó la carrera de Artes Combinadas en la Universidad de Buenos Aires.

En 2009 fue becado por el John F. Kennedy Center for the Performing Arts de Washington, EE.UU., en conjunto con el Bureau of Educational and Cultural Affairs of the U.S. Department of State para formar parte del Cultural Visitors Program for Directors para artistas internacionales emergentes.

Entre sus últimos trabajos actorales se destacan Amargo dulzor, Aires y Aguas, los tres espectáculos dirigidos por Marcelo Katz; En tus últimas noches y Te encontraré ayer, ambas escritas y dirigidas por Francisco Lumerman; y Lisístrata, con dirección de Claudio Tolcachir. Como director estrenó El otro día escuché esa canción que tanto te gustaba y En la mañana, de Daniel Veronese. Participó de varios Festivales y Encuentros Teatrales a nivel Nacional e Internacional y trabajó en numerosos filmes, cortometrajes y publicidades.

A nivel docente creó y dirige junto a Francisco Lumerman la Escuela de Actuación Moscú en la cual dicta talleres para adolescentes y adultos. Asimismo, es profesor en diversas instituciones como Timbre 4, Andamio 90 y Centro Betanzos de Buenos Aires.

Como escritor ha publicado cuentos, poemas y trabajos de investigación en Argentina y en España. 

DANIEL BEGINO - Actor

Daniel Begino, nacido en 1968, es actor, director y profesor de teatro.

Se formó actoralmente en la Escuela de Arte Dramático Andamio 90 donde tomó clases con su directora, Alejandra Boero, y con Luciano Suardi, Alejandro Samek, Eduardo Riva y Lucero Aguilar. Cursó talleres complementarios de teatro-danza con Silvia Vladimiski y Salo Pasik; de clown con Marcelo Zapalá; de entrenamiento acrobático con Alberto Dorado; de circo en la Escuela de Circo Argentino con los hermanos Videla; de comicidad con Ricardo Streiff y Sergio Coy; y participó del Taller para directores y actores dictado por Vivi Tellas.

Entre sus principales trabajos de actuación se destacan 1984, sobre la novela de G. Orwell, dirigido por Gabriel Brunetto; 1789, dirigida por Alejandra Boero y Julio Baccaro (premio ACE, María Guerrero y Gregorio Laferrere); Ensayo Hendel, dirigido por Guillermo Cacacce; Sueño de una noche de verano, El Eternauta, La tempestad y Vote Morena, con el grupo de Casa Morena; Nekrasov, de J. P. Sartre, con dirección de Julio Baccaro; Lisístrata, de Aristófanes y Medea, de Anouilh dirigidas por Eduardo Riva y Rita Armani; y Rastros dirigida por Luciano Suardi en el Teatro Sarmiento.

En su rol de director ha estrenado, entre otros, los siguientes trabajos: La Opera de los dos centavos  de B. Brecht; La Caperucita  de Clásicos desclasicados, de Ernesto Suárez; El centrofoward murió al amanecer, de Agustín Cuzzani y Casa Tomada y Las malnacidas, ambas basadas en cuentos de Julio Cortázar. 

Como docente desde hace años dicta diversos talleres en varias instituciones como los talleres de iniciación, de Comedia dell`arte y producción teatral en el Complejo Cultural Chacra de los Remedios del G.C.B.A.; los talleres de actuación de la Escuela Timbre 4, dirigida por Claudio Tolcachir; y los Talleres de Naturalismo y sobre el Método del  Actors Studio en el Paraje Artesón.

LORENA BARUTTA - Actriz

Lorena Barutta, nacida en Argentina en 1975, es actriz, docente y directora teatral.

Realizó su primera formación como actriz en la Escuela de Arte Dramático de Alejandra Boero entre 1989 y 1996. Estudió Clown con Marcelo Zappala y educación de la voz y canto con Magdalena León. Realizó seminarios con Jos Housben (Escuela de Lecoq), Guillermo Angellelli (la danza de las acciones), Rubén Szchumacher (Del texto a la escena. Posibles criterios para ingresar a un montaje) y actualmente cursa el Profesorado en Artes en Teatro en el Instituto Universitario Nacional del Arte, I.U.N.A.

Como actriz se destacan sus trabajos en 1789 dirigida por Alejandra Boero y Julio Baccaro, Lisístrata dirigida por Eduardo Riva y Rita Armani, En un lugar y en un segundo exacto y La fábrica dirigidas por Marcelo Zappala, Muerte dirigida por Julia Calvo y Claudio Martinez Bell; Los efectos del viaje dirigida por Javier Swedzky; Y Apuntes para volverse a ver de Gonzalo Ruiz.

A nivel cinematográfico participó del film Los inquilinos del infierno, dirigido por Damián Leibovich y Juan Cruz Varela, entre otros trabajos.

Como docente dicta clases en la escuela dirigida por Claudio Tolcachir, Timbre 4;  en la escuela dirigida por Hugo Midón, Rio Plateado; en el Centro Cultural 25 de Mayo perteneciente al Centro Cultural San Martín; al tiempo que se desempeña como docente y Directora del elenco en el Colegio de la Ciudad. Trabajó asimismo en el  Espacio teatral El hormiguero y en el Colegio Superior de Artes del Teatro y la Comunicación (Andamio 90).

CECILE CAILLON - Actriz

Cecile Caillon, nacida el 11 de mayo de 1961, es actriz, clown, bailarina y cantante.

Se formó como actriz con Julio Chávez y Hugo Midón y en comedia  musical con Ricky Pashkus, Carlos Gianni y Mariano Moruja. Estudió Zapateo Americano con Dolores Arrastra y realizó su educación de la técnica vocal con Susana Naidich, Mariana Dratman, Daniel Cirilo y Marta Corbacho.

Se desarrolló como clown con Marcelo Katz en Espacio Aguirre durante más de cinco años.

Entre sus últimos trabajos actorales se destacan Aguas, Aires y Cabaret, las tres bajo la dirección de Marcelo Katz y Bajo la luna, de Marcos Arano y Hernán Salcedo. En comedia musical se destacan Sin rollos y Mulan.

Realizó trabajos televisivos en Con Alma de tango y en Trillizos, al tiempo que participó de varios cortometrajes de ficción.

Como cantante lleva más de treinta años formando parte de Canto Coral, con dirección de Eduardo P. Alemán. Asimismo, realizó presentaciones en el Café de los Ángeles y en el espectáculo Trípticos en La Vaca Profana y grabó los discos Piedras salteñas y Peñas Blancas, que resultó ganadora del concurso de música folklórica del Fondo Nacional de las Artes. 

LUCILA GARAY - Actriz

Lucila Garay, de 26 años, es actriz, docente y directora.

Egresada de la escuela de actuación de Claudio Tolcachir, Timbre 4, actualmente entrena con Enrique Federman. Sus primeros estudios fueron en  Andamio 90, donde trabajó Comedia del Arte, Naturalismo y Tragedia. Tiene también una importante formación en Mimo-teatro de la mano de Alejandro Pepe; y realizó los seminarios intensivos dictados por Verónica Oddó en el CELCIT.

Entre sus últimos trabajos como actriz se destacan Maternidad, surgido del Taller Montaje a cargo de Claudio Tolcachir; De la espera de las cosas, dirigida por Soledad Sauthier; Mira lo que hay que escuchar con dirección de Patricio Orozco dentro del marco del III Festival Beckett; y Palabristas de Lucía Laragione, con  dirección de Diego Faturos. Como mimo actuó en la obra Gente con Bombin, ganadora del premio del público en el Festival de teatro Otoño Azul 2005.

En 2010 estrenó Halley o el último días de nuestras vidas en Timbre 4, su segundo trabajo como dramaturga y directora, después de Terrame, estrenada en 2009. Fue asistente de dirección de Te encontraré ayer de Francisco Lumerman.

Como docente dictó clases de actuación en la escuela de comedia musical de Pablo Sánchez y actualmente en Timbre 4.

NICOLÁS ORTIZ DE ELGUEA - Actor

Nicolás Ortiz de Elguea es actor y nació en Buenos Aires en 1981.

Se formó actoralmente con Claudio Tolcachir  en la Escuela de Teatro Timbre 4 y con Alejandra Flores en el Centro Cultural Ricardo Rojas. Realizó talleres de Circo con Pedro Palacios en El Galpón De Catalinas Sur y se formó en la técnica de Clown con Tamara Kiper en la Escuela de Teatro Timbre 4.

Se destacan sus trabajos como actor en Te encontraré ayer (primer premio en el concurso de dramaturgia en el Festival Internacional de Teatro en Buenos Aires 2007), escrita y dirigida por  Francisco Lumerman; y Tundra de Leandro Halperín con dirección de Francisco Lumerman para el ciclo Polos, proyecto de intercambio con el Théâtre de L’Autre Amérique, Canadá. También trabajó en  Pampa del Infierno con dirección de Alejandro Leopardo;  Viento que vienes del Sur, con dirección Colectiva-Teatro Itinerante; y en Bomberos Voluntarios de la Boca con dirección de Pedro Palacios. Fue asistente de dirección de Vitel Toné con dirección de Diego Futuros.

Asimismo, participó en diversos cortometrajes: Atado a este Mundo, dirección Carlos Messuti; El Encuentro, dirección Alberto Romero y Huesos Frescos, dirección Antonio Varde; y protagonizó el comercial Dedo gordo de Personal.

Por otro lado y complementariamente, se encuentra cursando la carrera de Fotografía en el Universidad de Palermo.